lunes, abril 30, 2012

Debes recordar esto...



As time goes by - Casablanca

You must remember this:
A kiss is still a kiss,
A sigh is just a sigh.
The fundamental things apply
As time goes by.

And when two lovers woo
They still say: 'I love you'.
On that you can rely,
No matter what the future brings,
As time goes by.

Moonlight and love songs,
Never out of date.
Hearts full of passion,
Jealousy and hate.
Woman needs man,
And man must have his mate.
That, no one can deny.

It's still the same old story,
A fight for love and glory,
A case of do or die.
The world will always
Welcome lovers
As time goes by.

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A medida que pasa el tiempo.


Debes recordar esto:
Un beso sigue siendo un beso,
Un suspiro es sólo un suspiro.
Las cosas fundamentales se aplican
a medida que pasa el tiempo.

Y cuando dos amantes se atraen
Aún dicen: 'Te quiero'.
En eso puedes confiar,
no importa lo que el futuro traiga
a medida que pasa el tiempo.

La luz de la luna y las canciones de amor,
nunca están pasadas de moda.
Los corazones llenos de pasión,
celos y odio.
La mujer necesita al hombre,
Y el hombre debe tener su compañera.
Eso, nadie lo puede negar.

Es todavía la misma vieja historia,
Una lucha por el amor y la gloria,
Un caso de morir o matar.
El mundo siempre dará la
bienvenida a los amantes

A medida que pasa el tiempo.

lunes, abril 23, 2012

Los hombres de mi vida

Los hombres de mi vida. De los que ahora estoy rodeada y por quienes digo que a veces tengo sobredosis de testosterona. Y no es reproche, lo que sucede es que se me había olvidado cómo era estar con ellos, escucharlos, tratarlos... comprenderlos. Cinco años y medio conviviendo sólo con mujeres cala; tal vez por eso Dios me está recordando que también existen.

¿Quiénes son? Son ellos, los que he conocido desde hace algunos años o algunos meses. Los que me han acompañado voluntaria o involuntariamente en mi proceso de vida y fe, los que me han soportado mi mal humor y mis quejas de mujer.

Por ellos he tenido que romper los esquemas y prejuicios que me creí durante la prepa y la universidad. Gracias a ellos he tirado a la basura mi orgullo feminista trasnochado -no sin algo de dolor-, he roto en pedacitos el papel que decía "liberación femenina" que tenía colgado en la pared de mi mente para sustituirlo por un sencillo cuadro de humildad. Todavía no me acostumbro a él, pero sé que es lo mejor.

Son varones con quienes puedo entablar una plática, porque escuchan y preguntan. ¿De dónde sacamos que no pueden conversar? Me confrontan con sus observaciones y cuestionamientos; y me confortan con sus palabras de ánimo. Me ayudan a mirar con otra perspectiva los problemas de la vida, y jamás han dudado de mi capacidad (aunque yo sí lo haga).

No son cualquier hombre, pero simplemente son ellos. He aprendido a valorar su sensibilidad frente a lo bueno y lo no tan bueno; he compartido la emoción de una puerta abierta, una atinada decisión o la gracia de Dios expresada en hechos concretos. Igual he aprendido que también lloran por la impotencia y la muerte. Y lo hacen genuinamente, sin chantajes y sin máscaras. Junto a ellos he llorado la pérdida y he caminado el duelo, para mirarlos ahora con asombro, respeto y admiración porque han crecido, han madurado, se han fortalecido. 

A los mayores y a los pequeños los miro y mi mente vuela, imaginando lo grandiosos que pueden ser y las bendiciones que Dios dará a través de ellos. ¡Cuán importantes son en el plan de Dios! Han sido puestos para ser líderes íntegros en la familia y en la iglesia, en sus trabajos y en cualquier lugar. Líderes siervos que enseñan al mundo que su identidad no depende de la dominación que ejercen sobre otros/as; hombres que temen a Dios para bendición de los que les rodean. ¡Qué privilegio servir a semejantes personajes!

Los hombres de mi vida, por los que ruego al Señor que perfeccione su fe y les dé sabiduría para comprender para qué están en esta vida. Por quienes pido al Señor que guarde su corazón, porque también lo tienen.

Los hombres de mi vida, los que llevo en mi mente y en mi corazón.

miércoles, abril 18, 2012

La historia cuenta - Aldaba

Desde hace varias semanas estoy escuchando a Aldaba (un grupo de música cristiana latinoamericano). Esta canción particularmente ha captado mi atención... resuena en mi cabeza el coro... "la historia... se hace un escenario más de tu palabra, demuestra que amarte bien vale la pena"...


LA HISTORIA CUENTA
Salmo 44

La historia cuenta, los tiempos hablan
Y en sus relatos nos llega clara
Esa ternura con que nos amas
Ese cuidado que nos deparas

La historia pinta y se colorea,
Y en sus retratos, como una huella,
No falta nunca tu fiel presencia
Amplia y serena
Cual acuarela

La historia vive, relata y retrata,
Testifica en sí tu poder y tu fuerza
Se hace un escenario más de tu palabra
Demuestra que amarte bien vale la pena

La historia duerme y despierta en tu mano
Forja sus edades sobre tus milagros
Sube por la cuesta dura del calvario
Desanda en tu cruz el mal de sus pasos.

(para más info sobre Aldaba: http://www.santiagobenavides.com/aldaba)

jueves, abril 12, 2012

Seguir caminando, ¡aunque los pies duelan!

"Como el Padre me ha enviado, así también yo os envío" (Jn 20:12). ¿Cómo fue enviado Jesús? Fue enviado a sufrir con un mundo que sufre, identificándose en amor de forma tan profunda que estuvo dispuesto a morir por nosotros. Nos envío como sanadores, pero aún en medio del proceso de sanarnos a nosotros mismos.
Nos envía como personas que han experimentado el quebranto y las heridas, pero que también conocen el poder transformador de la resurrección, que nos da vida. Aunque aún no hemos llegado, definitivamente estamos en camino, y nos regocijamos en esto.
La verdad es que las personas están dispuestas a escuchar cuando saben que sufrimos y tenemos luchas como ellos, pero que aún así Dios nos está dando las fuerzas para tomar el siguiente paso y seguir otro día más. Las personas se dan cuenta cuando hablamos palabras de paz que surgen del fuego en nuestra vida. Hay algo poderoso en un testimonio de este tipo.
La mayoría de las personas quieren saber si Dios realmente marca una diferencia. ¿Jesús les puede ayudar y darles un significado, un propósito, guía y fuerza para su vida también? Cuando respondemos: "Sí, yo he experimentado de primera mano el poder de Dios en medio del dolor", damos esperanza a los demás. Dios tomará nuestras heridas y las usará para ministrar a los que han sido heridos de forma parecida. Nos envía como sanadores heridos; personas que están permitiendo que sus heridas transformadas sean usadas por Dios para su gloria."
Este texto lo estoy citando del libro La esperanza tiene sus razones de Rebecca M. Pippert (Publicaciones Andamio),  que estoy leyendo desde hace unas semanas.

La verdad, ha sido una lectura interesante que me ha ayudado a recordar y re-ubicarme en la fe, en medio de la salida de un invierno. Algunas notas sobre ello:

- Todos estamos en la búsqueda de la felicidad. Ese no es el problema en sí, más bien que buscamos mal y en lugares equivocados.
- Nada de lo que yo quiera hacer, ni el más grande de mis esfuerzos, servirá para lograr esa felicidad ni la verdadera plenitud.
- He conocido a Jesús y he empezado a caminar con Él, ¡pero ni siquiera eso puedo hacerlo por mí misma! Necesito de su perdón, su gracia, su Espíritu para seguirle fielmente.
- Soy una mujer con heridas y cicatrices -¡como los demás! Y eso no significa que no pueda servirle; es más, aún con eso Él me llama, y esas mismas marcas Él las usa para su gloria.
- El arrepentimiento es permanente: cada vez que descubra un pecado más, debo recurrir a él y rendirme nuevamente a Cristo.
- ¡Ser más consciente de mi pecado es buena señal! Es decir, sería más preocupante si no reconociera mi pecado, porque significaría que me estoy alejando de Cristo y volviendo insensible a mi maldad. Mientras más cerca está la luz de la oscuridad, se va mostrando más lo que hay en ella.


Ha sido reconfortante esta lectura; me anima a seguir confiando, a seguir haciendo preguntas y no conformarme con lo que escucho... a seguir buscándole!! Porque este caminar lo hacemos de Su mano... ¡y vale la pena seguir aunque los pies duelan!